¡La nueva colección Vírgenes de Chile está lista para que la conozcas!

La destacada artista visual Rosario Fuentes debió sumergirse en libros y archivos de museos para concebir las ilustraciones que representan a las imágenes religiosas más populares del país.

Catalina Hernández

¡La nueva colección Vírgenes de Chile está lista para que la conozcas!

La artista visual Rosario Fuentes debió sumergirse en libros y archivos de museos para concebir las ilustraciones que representan a las imágenes religiosas más populares del país.

Revisión de libros y visitas a los archivos de Museo Histórico Nacional e iglesias de Santiago, fueron parte del trabajo de investigación que realizó la artista visual Rosario Fuentes para concebir las ilustraciones de la colección Vírgenes de Chile. En esa labor, descubrió montones de detalles que luego plasmó en las acuarelas. “Una cosa que me llamó mucho la atención fue que las vestimentas que las vírgenes usan dentro de los templos durante todo el año es distinta a la que les ponen cuando las sacan en los días de fiesta. Los dibujos los hice utilizando los colores que ocupan para las festividades”. 

Los rostros de las vírgenes y de los niños requirieron un trabajo muy cuidadoso.

Entre los textos que Rosario revisó está “Chile mestizo: tesoros coloniales” del Centro Cultural La Moneda, y la tesis “Imagen viviente, iconografía andina en los trajes de la fiesta religiosa de La Tirana: patrimonio visual del norte de Chile” de Paulina Aliaga Barros. La ilustradora también buscó que la historia y el simbolismo que acompaña a cada una se vieran reflejados en los dibujos. “Cada elemento no es solo decorativo, todos tienen su cuento. Por ejemplo, en la ilustración de la Virgen de lo Vásquez puse plantas en el fondo porque a ella la encontraron detrás de unos arbustos. Y la de La Tirana tiene un fondo con estrellas porque es una virgen muy ligada a la historia precolombina del norte”.

Para Rosario, el mayor desafío de este trabajo fue simplificar la gran cantidad de detalles estéticos que encontró en su investigación sobre las vírgenes y que el resultado final también tuviera algo de su sello personal. “Llegar a ese punto de encuentro no fue fácil. Fue un tremendo desafío. No había tenido la oportunidad de meterme mucho en este mundo, pero fue muy especial conocer más del tema y descubrir las historias de cada virgen y el arte que hay detrás de ellas”.

 

La ilustradora tuvo que investigar en archivos y libros para lograr los detalles de los vestidos.